Los matrimonios celebrados por la Iglesia tienen algunas particularidades con respecto a los enlaces civiles, siendo una de las principales, el hecho de que no existe el divorcio en sentido estricto de la palabra. Sin embargo, existe un mecanismo que permite disolver el vínculo entre los cónyuges: se trata de la nulidad eclesiástica. Con la nulidad, como decimos, desaparece el vínculo y los cónyuges serán libres de volver a contraer matrimonio en el futuro, si así lo desean.
Pero debemos tener en cuenta que las causas de nulidad están tasadas, es decir, solo se podrá obtener la nulidad si concurre alguno de los supuestos que regula el Código de Derecho Canónico. Estas causas se dividen varios tipos:
- Nulidades derivadas de impedimentos. Un ejemplo sería que existan impedimentos de edad (16 años en el varón y 14 años en la mujer), impedimentos de parentesco, etc.
- Nulidades por vicio en el consentimiento. Por ejemplo, haber contraído matrimonio por violencia o miedo grave.
- Nulidades por defecto de forma. Por ejemplo, que el matrimonio se hubiera celebrado sin la persona autorizada para ello.
En caso de que desee consultar todas las causas, puede visitar el siguiente enlace sobre causas de nulidad eclesiástica.
Si queremos obtener la nulidad, por tanto, nuestro caso deberá poder incluirse en alguna de las causas previamente tasadas. El proceso para obtener la nulidad se ha simplificado mucho en los últimos años, gracias a la reforma operada por el Papa Francisco. Por ello, si está planteado solicitar la nulidad, queremos informarle de que en estos momentos se trata de un trámite más sencillo y que no requiere tantos años de espera, como sí sucedía anteriormente.
Es importante destacar que la solicitud de nulidad la puede realizar un solo cónyuge, sin necesidad del consentimiento o mutuo acuerdo de la otra parte.
Será conveniente acudir a un abogado especializado en divorcios, pues será quien oriente a los cónyuges sobre la forma en que se llevará a cabo el proceso, requisitos que se deberán cumplir, etc. En nuestro Despacho de abogados de Madrid somos especialistas en divorcios, por lo que ponemos nuestros conocimientos y experiencia en la materia en manos de nuestros clientes que así lo necesiten. Si desea más información, no dude en pedirnos cita previa.